PROYECTO DE ACOMPAÑAMIENTO SOCIAL PARA LA BÚSQUEDA DE EMPLEO

Con el objetivo de facilitar el acceso al mercado laboral de personas que reúnan condiciones de empleabilidad y conseguir una normalización de su situación personal y familiar, en 2013 se pone en marcha YO COCINO EMPLEO, un nuevo proyecto en colaboración con el Banco de Alimentos, la Universidad Francisco de Vitoria, el programa 1 Kilo de Ayuda, y varios hoteles, entre los cuales el Hotel Miguel Angel tiene el placer de colaborar desde su inicio, elaborando semanalmente 50 menús que incluyen primer y segundo plato, postre y pan.

El proyecto está destinado a familias con miembros en desempleo, con menores a su cargo y que se encuentran en riesgo de exclusión social: casos de desahucio, personas sin apoyo de redes familiares, familias con algún miembro con discapacidad física o intelectual, o madres que asumen todas las cargas familiares.

Con Yo Cocino Empleo se pretende dar respuesta a necesidades que a menudo se atienden desde instancias distintas trabajando en dos ejes:

Contribuyendo a la cobertura de necesidades básicas de alimentación a familias en situación de alta vulnerabilidad, con la entrega de menús ya preparados donados por hoteles y restaurantes, cestas con productos de alimentación, limpieza e higiene aportados por el Banco de Alimentos y 1 Kilo de Ayuda.
Facilitando itinerarios de inserción laboral, en los que incluyen aspectos como el diagnóstico de empleabilidad, la orientación, la formación, y la evolución de resultados.

Se busca el compromiso de los participantes en el seguimiento y cumplimiento de las pautas que se les proporcionan, dándole importancia a que sean ellos mismos los protagonistas del proceso y los verdaderos artífices de sus logros.

Los menús se reparten a diario entre las familias que los recogen y se los llevan a casa, evitando de ese modo el cierto estigma que puede suponer para muchas personas acudir a un comedor social. Por otro lado además de contribuir a que la familia, y en especial los niños, tengan acceso a una dieta completa, los beneficiarios pueden centrarse sin angustia en la búsqueda de empleo al tener garantizada la cobertura de parte de las necesidades básicas de alimentación de la familia.

Una estupenda iniciativa con la que el Hotel Miguel Angel tiene la satisfacción de colaborar.