Comienza el nuevo año 2020 y tras los excesos gastronómicos de la Navidad se plantean nuevos propósitos y retos entre los que se suele incluir la actividad física.
En los planes para el nuevo año la actividad física suele tener un papel muy destacado, ya sea para mejorar la salud, bajar de peso, preparar alguna competición, recuperarnos de una lesión o patología específica o simplemente para ser menos sedentario.
No importa cuál sea el objetivo por el que nos planteamos empezar con una actividad física regular, pero sí es muy importante no caer en el error de comenzar con muchas ganas a hacer deporte y dejarlo a los pocos días.
Un alto porcentaje de las deserciones es por el tipo de actividad que se ha elegido y la intensidad con que se hace. Esta situación se repite cada comienzo de año en los centros deportivos y los gimnasios, que se llenan de nuevas inscripciones y después de unas pocas sesiones, no vuelven.
Antes de comenzar con el nuevo reto de realizar una actividad física, debemos pensar que ese ejercicio nos debe motivar de alguna manera, es decir, que sea porque es un buen recuerdo de los juegos de infancia, algún deporte que hayamos practicado en algún momento de nuestras vidas o una modalidad deportiva que nos recuerde a alguien o algo especial y nos pique la curiosidad.
Un factor que también influye a la hora de elegir la actividad física es el profesional que la imparte. Es aconsejable dejarte asesorar por un profesional que te planifique, de acuerdo a tus necesidades particulares y gustos, un plan de entrenamiento personalizado. De esta forma el éxito estará casi asegurado y evitaremos las deserciones tempranas.
Las personas que comienzan el año con un reto deportivo son valientes y si a los pocos días de su elección se aburren y lo dejan no deben tener sentimiento de culpa ni de falta de compromiso, simplemente tienen que escoger otro tipo de actividad física o cambiar la intensidad.
Lo ideal es empezar con una intensidad muy baja de entrenamiento, ya que en las fechas navideñas todos nuestros sistemas, sobre todo el endocrino, el digestivo, y el nervioso, sufren un gran desorden. La gran cantidad de comida y bebidas, así como los momentos de estrés por compras, viajes y preparativos hacen de estas fechas un carrusel de comportamientos atípicos, generándonos desordenes.
Una vez que el cuerpo ya se haya restablecido en todos sus niveles, poco a poco irás sintiendo que te pide más intensidad, convirtiendo el deporte que has elegido en una actividad cotidiana de tu vida. Irás notando una trasformación de forma progresiva y natural hasta lograr, sin que te des cuenta y disfrutando de las ventajas añadidas que la actividad te vaya planteando, que esa actividad física sea tu estilo de vida.
Te animamos a que nos visites en el Miguel Angel Wellness Club y te ayudaremos a elegir la actividad que más te convenga y apetezca.
¡TE ESPERAMOS!
