abcdef
July 30, 2019

De un tiempo a esta parte, la natación terapéutica es una de las actividades que más auge y éxito está teniendo entre las personas que sufren dolores o molestias en la espalda.

Normalmente para tratar problemas de la columna vertebral los especialistas recomiendan a los pacientes practicar natación o hacer ejercicios en agua. Se hace mayor hincapié en realizar ciertos trabajos físicos en el medio acuático como medio de rehabilitación y como entrenamiento.

En muchas ocasiones la relación con el medio acuático del paciente no le otorga de la capacidad ni la técnica necesaria para llevar a cabo esta actividad sin riesgo de agravar su lesión, a no ser que cuenten con el asesoramiento de un profesional o sigan un entrenamiento planificado.

En este sentido, los expertos recomiendan nadar siguiendo uno u otro estilo según la patología que se sufra. Por ejemplo, si se tienen problemas cervicales, aconsejan nadar a crol con snorkel, a crol normal (si se tiene una técnica correcta que no genere molestias en la zona) y a espalda normal.

Nunca hay que descartar los ejercicios de desplazamiento como la caminata o la bicicleta sobre un churro, ya que son ejercicios muy completos y que no dañan la espalda.

Para las personas que padezcan hipercifosis dorsal recomiendan nadar a crol con la cabeza fuera, sin hiperextensión cervical, o a espalda con la barbilla alejada del pecho.

Asimismo, en caso de patología lumbar, aconsejan nadar a crol con la cabeza dentro, y en caso de hiperlordosis, realizar todos los ejercicios de espalda y braza vertical. Además, si se tienen problemas de hombro, hay que evitar los estilos crol y espalda y nadar al estilo braza.

El nado a espalda es muy recomendable para mejorar la condición física del cuello. Las personas que nadan de forma controlada y dejan flotar la cabeza en el agua no tendrán problemas, ya que lo que no se debe hacer es fuerza para incorporar el cuello hacia adelante.

El estilo crol es muy positivo, ya que te encuentras boca abajo, aunque puede tener el problema de los giros del cuello. Si tienes dolor al girar el cuello nada despacio y sin realizar movimientos bruscos. Algunas personas tienen dificultades para respirar correctamente cuando se nada a crol, esto también puede ser un problema si se realizan movimientos inadecuados por falta de técnica.
Si el dolor de cuello viene acompañado del de espalda, se puede reducir realizando ejercicios en el agua en una piscina que tenga unas cuantas profundidades diferentes entrenando con el agua hasta la cintura o con el agua hasta el pecho.

Si se padecen problemas de estabilidad o equilibrio el consejo es utilizar calzado especializado para dentro del agua. Otra recomendación a tener en cuenta para evitar dolores en la espalda es entrar en la piscina caminando por las escaleras en lugar de hacerlo saltado o tirándose de cabeza.

Si tienes alguna duda sobre la natación terapéutica en el Miguel Angel Wellness Club contamos con un equipo de profesionales que podrá resolverlas y guiarte por el camino indicado para tener una espalda totalmente sana.


Regresar al blog

Posted in: